RIBADESELLA.

¿En que piensas cuando piensas en Asturias? Chuparte los dedos mientras untas un buen trozo de cabrales en pan, pimplarte un despampanante cachopo en alguna sidrería con manteles de cuadros. Hacerte una foto escanciando un culín de sidra como un mozu de la tierra. Delirar con cualquiera de sus playas. Volver a probar los oricios. Oviedo. Llanes. Empacharte de andaricas, que no te saben igual en Burgos. Gijón. Ribadesella?!

Posiblemente Asturias es el paraíso natural porque ya Adán tomó la manzana, aunque no le dieron tiempo para hacer sidra...🍏

Quiero recordar  este post como un sueño, un sueño inolvidable que me lleva hasta Ribadesella, una bella ciudad asturiana donde encuentras la combinación perfecta de mar y monte, de agua y naturaleza, de historia y leyendas. Conocida en todo el mundo por su descenso internacional del Sella, la localidad asturiana de Ribadesella alberga muchos otros rincones interesantes para visitar, sin ir más lejos el mismo pueblo, uno de los más visitados en el norte de España, quizá sea por su belleza o quizá por su gastronomía, pero lo cierto es que es una visita obligada aunque sólo puedas disfrutar de ella un día, merece la pena!

Te cuento  aunque seguro que ya lo sabes, que Ribadesella está claramente dividida en dos por la desembocadura del Sella. En la orilla oeste se sitúa el casco histórico de la ciudad lleno de rincones especiales, donde se encuentra todo el ambiéntillo de restaurantes y sidrerías, las calles son completamente peatonales y conservan esa estética de los pueblos del siglo XVI. Las calles estrechas y las casas con sus colores pastel, hacen que Ribadesella sea uno de los pueblos costeros más deliciosos del norte de España.

Al otro lado del puente está el tranquilo y apacible paseo de Santa Marina, un paseo marítimo justo sobre la playa, plagado de espectaculares edificios de estilo indiano que hay en con vistas al mar, todo un lujo.

Aquí, en esta encantadora zona de Ribadesella se encuentra el Hotel Villa Rosario: un delicioso e instagramizable palacete indiano de 1914 rehabilitado con mimo y reciclado en hotel que es ideal!

Decorado con muebles de anticuario mezclados con obras de artistas contemporáneos. Espectacular su escalera de cerezo para acceder a las habitaciones. Un lugar situado en un marco incomparable, rodeado de un precioso jardín y con una amabilísima y cercana atención por parte de todo el equipo del hotel.

Un mágico hotel en el que vas a olvidarte del mundo. Literalmente!

Pero es que además el Hotel Villa Rosario, cuenta con un restaurante de cocina tradicional cántabra gestionado recientemente por el asturiano Marcos Granda (tras lograr dos estrellas Michelin en sus restaurantes de Madrid y Marbella) situado en un emplazamiento privilegiado, desde donde se puede ver y escuchar el oleaje del mar.

El restaurante Ayalga , qué significa hallazgo encontrado en la playa, sin duda ha sido un agradable descubrimiento personal donde pude disfrutar de una velada gastronómica perfecta, con productos de temporada y comprobar de primera mano el tándem perfecto entre la cocina asturiana y la cántabra.

Pero para despiporre y cachondeo si quieres echar unos culines de sidriña en pleno centro de Ribadesella puedes encontrar un sinfín de típicas sidrerías, una de mis favoritas es La Marina, ubicada en el muelle riosellano.

Un amplio local con una gran terraza donde dar rienda suelta a tu estómago y paladar con productos de la mar y típicamente asturianos.

La otra de mis sidrerías top “riosellanas” es La Guía, situada en el casco urbano, en una típica villa rural de Ribadesella. Esta pequeña sidrería cuenta con una terraza de patio exterior donde tomar una sidras a la sombra de sus árboles, un pequeño comedor acristalado y una zona de barra para poder escanciar tu sidra tan a gusto.

Se sirve pescado y marisco adquirido directamente de la lonja de Ribadesella, procedente de una pesca artesanal, sostenible, garantía de frescura y calidad.

Ojo a las croquetas variadas casera, muy recomendables!

Y que mejor momento para regodearme en la gula y el disfrute puro que maridar todos estos bocados que con las manzanas que dan lo mejor de su jugo y se convierten en esta espumosa y chispeante bebida de vida con la que a mí tanto me gusta brindar, la sidra!

Así que no me extraña que esta villa asturiana se haya ganado el tercer puesto como una de las maravillas rurales de España, con atractivos que te sumergen en historia y tradición mientras paseas entre sus casonas solariegas o descubres la furia del cantábrico en las calas salvajes y acantilados que dibujan el contorno del municipio. Mar y monte, una dualidad que puedes descubrir en Ribadesella!

Como no te voy a querer 🍏